El mito
Luego de volar por los nueve mundos, Hugin (el pensamiento) y Munin (la memoria) contaban a su señor Odin, monarca de todo Asgard y dios de la sabiduría, la guerra y la muerte, todo cuanto habían comprendido y memorizado. Hugin y Munin eran ambos cuervos.
Así, desde tiempos tan remotos eran ya reconocidas ambas cualidades, pensamiento y memoria en este magnífico animal que es el cuervo. Juzgado más por su apariencia que por su intelecto, los cuervos fueron históricamente asociados a la muerte, el mal augurio, la desidia. Quizás en ello tuvieron que ver su plumaje oscuro, su grito ronco, sus banquetes sanguinolentos sobre los cadáveres que dejaban las batallas épicas o las pestes que azotaron el medioevo. Le dieron esa mística de portador de inteligencia vil y oscura que aún hoy les envuelve.
La inteligencia de los cuervos
Sin embargo, lejos de todo prejuicio, estos animales son sencillamente increíbles. Se pueden contar con los dedos de ambas manos los seres vivos que tienen conciencia de sí mismos, como los humanos, los grandes primates, los elefantes, los delfines, los perros y los cuervos. La prueba inequívoca es que frente a un espejo, son capaces de reconocerse a sí mismos en lugar de interpretar su reflejo como un animal diferente. Es la única ave que es consciente de que existe y por ende que de que existen otros.
Resuelven problemas complejos en fases ordenadas. Por ejemplo, pueden coger una ramita, meterla en un huequito para que se llene de hormigas, luego sacar la ramita con las hormigas, machacarlas para hacer una mezcla, esparcir la mezcla por el suelo y revolcarse en la misma. Aun hoy se desconoce para qué hacen esto, algunos científicos afirman que es para untar sus plumas con sustancias insecticidas que contienen los insectos, otros incluso llegan a afirmar que para drogarse.
La empatía de los cuervos
Pero quizás la muestra más descomunal de inteligencia de estos animales es que son extremadamente empáticos. Los cuervos juegan escondiéndose en la nieve para sorprender al otro, arrojándose nieve. Los cuervos consuelan a los compañeros golpeados, aletean sobre ellos y hacen sonidos específicos. Los cuervos indican, hacen gestos para decirle al compañero que coja una semilla, por ejemplo. Los cuervos hacen funerales cuando un miembro muere, se posan a su alrededor, revolotean y cantan durante un rato.
El amor
Sin embargo, estos abucheados y vilipendiados animales son capaces de lo más hermoso, amarse para toda la vida. Una pareja de cuervos será la misma siempre, aun cuando uno de los dos muera, será la misma ya que no vuelven a tomar pareja jamás. Uno de los espectáculos mas maravillosos de la naturaleza es la danza del cortejo, donde la pareja se deja caer desde la altura dando vueltas sin mover sus alas.