Si por fin has decidido que quieres cambiar la dieta de tu gato del pienso al BARF debes tener claro que no puedes hacerlo de forma automática. Se trata de un proceso delicado en el que tendrás que tener paciencia e introducir diferente transiciones y cambios progresivos en su alimentación hasta que consigas que tu gato logre cambiar del pienso a la alimentación BARF. A continuación te contamos algunos trucos y consejos para cambiar la dieta de tu gato del pienso al BARF.
Ten paciencia
Lo primero que debes tener claro antes de cambiar la dieta de tu gato del pienso al BARF es que debes armarte de paciencia. Ya sabes que los gatos tienen carácter y por tanto el proceso en la mayoría de casos va a ser largo. Además puedes tener que enfrentarte a escenarios muy diversos: hay gatos que el primer día ya aceptarán los alimentos crudos mientras que otros ni se acercarán a ellos en meses. Algunos animales consumirán verduras y pescados sin problema mientras que rechazarán la carne o viceversa. Se trata de ir probando, de tener paciencia y de acompañar a tu mascota en este proceso poco a poco. No debes extrañarte si al principio rechaza todos los alimentos en crudo y finalmente le acaban encantando, así como también puede suceder que en principio le guste algo y después no quiera comerlo. Los gatos son así, pero seguro que ya lo sabes y si quieres lo mejor para su salud tendrás paciencia para conseguir cuidar y proteger al máximo su salud acostumbrándole poco a poco a un modo de alimentación más natural y saludable.
Transición con comida húmeda
Aunque existen como decimos algunos casos aislados en los que los gatos prueban la comida cruda de la dieta BARF el primer día, si están acostumbrados a comer pienso es bastante improbable que lo hagan porque en muchos casos ni siquiera sabrán que se trata de comida. En estos casos, como nos explican los expertos de Zaunk.com, lo mejor que puedes hacer es empezar directamente con comida húmeda. Primero puedes combinar su pienso de siempre con algo de comida húmeda para gatos y poco a poco, cuando ya la acepte, darle únicamente comida húmeda, ya que será un primer paso para acercarle a la comida cruda.
Introduce poco a poco los alimentos
A partir de aquí puedes empezar a introducir alimentos en crudo como el pollo, las sardinas o alguna verdura mezclándolos siempre con la comida húmeda. Poco a poco tu gato se irá acostumbrando a su consumo y en este momento podrás empezar a retirar la comida húmeda para que tu mascota pase a alimentarse únicamente con la dieta BARF. En estos casos, cuando retires por primera vez la comida húmeda te recomendamos seguir aderezando su comida con algo del aceite o caldo de este tipo de alimentos para que tu gato se decida a comer los alimentos crudos. Más tarde podrás echarles algo de aceite para que le resulten más apetecibles y finalmente, con paciencia y constancia conseguirás que tu mascota haya hecho una transición perfecta del pienso al BARF.
Varía los alimentos
La dieta BARF no puede consistir siempre en los mismos vegetales o en el mismo tipo de carne sino que tendrás que ir variando los alimentos en crudo que ofrecerás a tu gato. En este punto resulta especialmente importante que prestes atención a lo que le gusta y lo que no. De esta forma podrás introducir más veces al principio los alimentos en crudo que más le agraden y así asegurarte de que se acostumbra a este tipo de alimentación. No te recomendamos dejar de darle en principio ningún alimento si las primeras veces no te lo coge porque es probable que cuando se acostumbre a la alimentación en crudo aprenda a apreciarlo en incluso se convierta en una de sus opciones favoritas. Ahora bien, cuando ya lleves meses dándole un vegetal concreto y te lo haya rechazado todas las veces no sigas insistiendo porque será una pérdida de tiempo para tu mascota y de dinero para ti.
Ayúdate con el ayuno
Si en algún momento crees que tu mascota está dando pasos atrás puedes ayudarte del ayuno de comida. No debes hacer esto de forma prolongada y lo mejor será consultar al veterinario para que te ayude a plantearlo de forma correcta pero en muchos gatos es una alternativa eficiente. Consiste en dejar a tu gato sin comida durante unas 24 horas para que tenga hambre y elimine por completo los restos de pienso de su cuerpo. Así, cambiará su alimentación drásticamente y al tener hambre los alimentos de la dieta BARF le sabrán mejor y será mucho más sencillo que pueda acostumbrarse a cambiar su dieta seca por alimentos crudos de forma eficiente porque a nivel psicológico la experiencia de terminar con el ayuno será agradable para tu gato y además le permitirá concebir como comida alimentos que de otra forma probablemente no sabría entender que eran para su consumo.